6 de junio de 2011

No soy muy alta, ni delgada. No tengo un tipo espectacular, de ésos que los hombres no pueden evitar mirar, ni nunca lo he tenido. No domino el francés, ni siquiera el inglés, y en mi propia lengua hablo de más. No soy ordenada, no soy la típica chica inteligente, ni la guapa, ni aquella que es demasiado simpática. Canto canciones todo el rato, cualquier momento es bueno para desprender alegría y contagiar un poco al mundo.Tengo muy poca paciencia, y a menudo digo cosas de las que debería arrepentirme. Sinceramente, creo que mis peores pesadillas han sido las que he tenido despierta, todas las cosas que en poco tiempo he podido ver, pero los mejores sueños también han sido aquellos en los cuales ni tan siquiera estaba dormida. Confieso que, en realidad, tengo una adicción un tanto descontrolada hacia todo lo prohibido, y me tienta demasiado lo inmoral. No soy capaz de entender por qué motivo me costaría tanto olvidarte, ni porqué a ti te costaría tan poco.